sábado, 27 de abril de 2013

A 27 años de la catástrofe nuclear de Chernobyl

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En la madrugada del 26 de abril de 1986 la ciudad ucraniana de Pripyat iba a ser testigo te una de las mayores tragedias nucleares de la historia de la humanidad, cuando el reactor número 4 de la planta nuclear de Chernobyl colapsaba y generaría una gran explosión luego de que unas pruebas que se realizaban en la planta salieran mal.

Debido al poder de la explosión el material radiactivo fue expulsado hasta la atmósfera y a cientos de kilómetros a la redonda, generando gravísimos daños ambientales, ecológicos y lo que es peor cientos de miles de perdidas humanas.

Como resultado directo de la explosión murieron instantáneamente 31 personas incluyendo a los dos operarios que estaban en la sala de control del reactor 4 en el momento de la explosión, y que dicho sea de paso jamás se encontraron sus cuerpos. Además la explosión causo heridas a otros 156 trabajadores que estaban esa noche en la planta nuclear, casi la totalidad de ellos morirían semanas o meses después por la inmensa dosis de radiación recibida.


La explosión produjo un gran incendio debido a que el núcleo del reactor 4 se alimentaba del combustible radiactivo a una temperatura de 2500 °C, haciendo que el reactor 4 ardiese como el mismo infierno.
Los primeros en acudir al lugar de los hechos fueron los bomberos locales, que creyendo que se trataba de un incendio común e ignorando la existencia de la radiación, se adentraron en la zona para cumplir con su deber de apagar el incendio, tarea que resultaría infructuosa e imposible. 
Los bomberos que participaron esa noche recibieron dosis mortales de radiación y todos ellos murieron en muy pocos días.

Cuando las máximas autoridades se enteraron dieron la orden de marcar una zona de exclusión de 30km a la redonda y que la ciudad de Pripyat fuese evacuada de inmediato por el alto nivel de radiación al que quedaban expuestos sus habitantes, provocando un exilio de casi 50.000 habitantes que partían en cientos de autobuses que los sacaban de la ciudad, causando que la ciudad quede desolada y abandonada hasta el día de hoy. 


En los días posteriores a la explosión se hicieron presentes miles de soldados del ejercito y fuerza área, así también como mineros, bomberos, ingenieros, científicos, obreros e inclusive campesinos voluntarios, todos ellos iban a formar el grupo conocido como "los liquidadores".
Los liquidadores tenían la misión de minimizar las consecuencias del desastre y tratar de contener el material radiactivo construyendo un sarcófago gigante de hormigón para que "encerrara" el edificio de la planta donde se ubicaba el reactor 4.

Para empezar a construir el sarcófago que contuviera la radiación que emanaba del núcleo del reactor 4, primero se debían quitar todos los escombros producidos por la explosión y tirarlos hacia el fondo del reactor 4 para rellenar ese pozo infernal creado por la explosión. 
Al principio para esta tarea utilizaban robots y maquinas a control remoto por el simple hecho de que un ser humano no podía estar expuesto a niveles de radiación tan elevados, pero la radiación era tanta que producía que los robots se descontrolaran y fallaran.

Fué entonces que el humano tuvo que hacer el trabajo que las maquinas no podían y por ese motivo surgieron los "biorobots", que tenían la terrible tarea de subir al techo del propio reactor 4 y tirar los escombros hacia el agujero que había quedado por la explosión y que en cuyo fondo había un núcleo que no cesaba de arder.


En el techo del reactor 4 los niveles de radiación eran tanto que los biorobots debían ir con máscaras llamadas "morros de cerdos" y pesados trajes forrados de plomo que pesaban entre 30kg y 40kg, y que además una vez en el techo del reactor 4 tan solo podían permanecer 40 segundos y enseguida debían bajar para ser relevados por el peligro de recibir dosis letales de radiación.

Así es como trabajaban los biorobots, quitando escombros con palas y manos entre el grafito y el plutonio en un techo que era tan negro como la misma muerte.
Al mismo tiempo decenas de helicópteros sobrevolaban el reactor 4 dejando caer cada uno de ellos miles de kilos de arena hacia el fondo del mismo. 

Luego de muchos días concluyó la tarea de recolección de escombros y otros trabajos paralelos alrededor del reactor, y se procedió a construir el sarcófago para cubrir todo el reactor 4 y así detener el escape de radiación al ambiente.
La construcción del sarcófago duró algunos meses, pero de todos modos construyeron el gran armazón de hormigón en tiempo record debido a incesantes días de trabajo "a toda maquina".


A los liquidadores que presentaban síntomas de irradiados las ponían en cuarentena en los hospitales con el fin de que no irradiaran a quienes lo rodeaban, y cuando fallecían colocaban sus cuerpos en ataúdes de plomo.
En total participarían unos 600.000 liquidadores provenientes principalmente de Ucrania, Bielorrusia y Rusia, de los cuales casi 100.000 perderían la vida por exponerse a niveles de radiación incompatibles con la vida humana.

Que ha cambiado desde Chernobyl? 

Ya han pasado 27 años desde la tragedia de Chernobyl y es tiempo de preguntarse que hemos aprendido de lo ocurrido y que se ha hecho para mejorar.

El sarcófago que cubre el reactor 4 ya tiene varias grietas que permiten fugas, por ese motivo en 2012 comenzó la construcción de otro sarcófago que costara unos 1500 millones de euros y que estará terminado a mediados de 2015, esto representa un gran paso hacia el bienestar humano.

Chernobyl sirvió para demostrar el verdadero estrago que puede hacer la energía nuclear si no se la controla como se debe, pero al mismo tiempo la NASA ha difundido un estudio en el que dice que las vidas salvadas por el uso de la energía nuclear han sido enormemente mayores a las perdidas a causa de esta, por lo que la energía nuclear es una gran ayuda para el desarrollo humano. 


Los países en los cuales existen plantas nucleares han intensificado e invertido mucho dinero en tecnología para la seguridad de las centrales nucleares.
Hace pocos días el Pentágono afirmó que Estados Unidos destinará entre 4 y 6 millones de dólares en implementar e investigar sobre tecnologías que puedan prevenir y detectar problemas nucleares, mientras que la Unión Europea firmó en 2010 un programa económico de 10 millones de euros por la misma causa.

No hay duda que las autoridades gubernamentales de los diferentes países han puesto mas responsabilidad en supervisar y controlar el uso de la energía nuclear. 
Solo me queda decir que la seguridad nuclear ha dado un gran paso pero aún queda mucho por hacer, sucesos como el ocurrido en la planta de Fukushima dejan en manifiesto que las plantas nucleares jamás van a ser del todo seguras, y como dije antes lamentablemente "hizo falta" que ocurriera lo de Chernobyl para darnos cuenta que la energía nuclear puede ser terrible si no se la usa adecuadamente.

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